Uno de los cuidados más básicos que le hacemos a nuestro vehículo es mantenerlo limpio, lavar la carrocería para quitar polvo, barro o tierra ayuda a que se desgaste menos la pintura y se aminore el daño por oxidación.
Sin embargo, lavarlo usualmente requiere gastar grandes cantidades de agua y esto no es bueno para el ambiente, ni para nuestra agenda, por eso tuvimos la curiosidad de saber si es conveniente limpiar el auto con agua de lluvia.
Para contestar esta pregunta abordamos el tema desde dos puntos de vista:
El lado positivo
Cuando tu vehículo está muy sucio y de repente cae una tormenta, al terminar observas que tu auto está “limpio” sin polvo, manchas de insectos, etc. Es algo que se agradece y sorprende al mismo tiempo. Sin embargo, algo que puedes hacer es aprovechar que la lluvia ablandó la mugre y dedicarle un poco de tiempo para tomar un trapo, balde, jabón especial y terminar de lavarlo adecuadamente con un mínimo esfuerzo.
El lado negativo
Si vivís es un área muy poblada y con mucho smog, la lluvia ácida es algo que seguramente ya conocés y has escuchado. Así como este tipo de lluvia puede dañar la tierra, lo hará también con la pintura de tu auto. El ácido se concentra en el esmalte al momento que se seca y se reactiva cada vez que mojas el vehículo, causando un daño posterior. No son muchas las zonas de Argentina que sufren este tipo de fenómeno (es más, me imagino solamente a sectores muy individualizados que estén próximos a grandes polos industriales, por suerte -todavía- no tenemos los problemas de contaminación que aquejan a ciudades como México D.F. o Santiago de Chile).
En áreas con mucha contaminación, lo mejor es mantener tu vehículo fuera de este tipo de lluvia. Si no podés evitarlo, usá alguna cubierta especial o poné tu auto bajo techo. Una buena medida preventiva es encerarlo frecuentemente, ya que esto disminuirá mucho el daño causado por los agentes corrosivos y mantendrá tu vehículo brillante.
