El anticongelante es un componente vital que se debe cambiar de manera regular para que tu vehículo esté en óptimas condiciones. Este líquido protege el radiador y otras partes del motor de corrosión y oxidación, además de mantener a una temperatura adecuada el propulsor evitando que se sobrecaliente. Asimismo si no se cambia periódicamente éste puede corroer la parte interna del radiador.
Como regla general el anticongelante se debe cambiar por los menos cada 2 años o en su momento cuando el vehículo haya acumulado los 40.000 km. Ya sea por tiempo o kilometraje es necesario hacerlo ya que para entonces el líquido pierde sus propiedades anticorrosivas.
Recuerda que para revisar, el refrigerante del motor debe estar frío y no debes hacerlo caliente, de lo contrario puedes quemarte y quedar seriamente herido. Existen dos tipos de anticongelante: el que es de color verde –de duración regular- y el de color rojo –de duración extendida-. Sólo agrega líquido nuevo si está descolorido o ha perdido su capacidad de calentamiento y enfriamiento; si tienes que hacerlo se debe hacer con la mezcla correcta: 50% agua y 50% refrigerante.