Mientras Lexus fue por el futuro con el LF-1 Limitless, Acura (submarca de Honda) se dejó llevar por el presente y llegó a Detroit con la RDX Concept. Esta SUV se muestra como un producto prácticamente listo para llegar a las líneas de producción. Es más, si no fuera por los retrovisores y algún que otro detalle, se podría decir que estamos frente al modelo definitivo.
Vemos una silueta marcadamente deportiva, influenciada por el Precision Sports Sedan. Resaltan la parrilla y los faros "Jewel Eye" con tecnología Full LED. Adentro continúa la misma tendencia, con elementos tomados directamente del Precision Cockpit, como la pantalla central de 10,2". De hecho, es el primer modelo de la firma en integrar ambas tendencias en su desarrollo.
En cuanto a lo mecánico, encontramos un cuatro cilindros de 2.0 L con 252 CV y 370 Nm sacado del Honda Accord, mientras que la transmisión es automática de décima. La potencia es enviada a las cuatro ruedas a través de un sistema de tracción integral SH-AWD con control vectorial de torque y cuatro modos de funcionamiento (Sport, Sport+, Comfort y Snow).
La idea de Acura es lanzarlo a mediados de año, por lo que resta saber qué más cambiará de este coche antes de que salga a rodar.